Forjando un futuro mejor: el impacto de la IA en el sector salud

Andy Acker: El grado de innovación que estamos viendo actualmente en el sector de la sanidad no se parece a nada que hubiera imaginado. Llevo invirtiendo en el sector desde hace casi 25 años a través de Janus Henderson, y los avances que estamos viendo hoy día y la repercusión que están teniendo en los pacientes van más allá de lo imaginable. Casi... mucho de lo que estamos haciendo actualmente habría parecido ciencia ficción incluso hace solo 10 años.

Michael Wooldridge: Bueno, la IA tiene una inmensa gama de aplicaciones potenciales. Va a afectar prácticamente a todos los aspectos de nuestras vidas, incluidos los relacionados con nuestra vida laboral y nuestro ocio. Esto creará un sinfín de nuevas oportunidades. Sin embargo, creo que la sanidad es una de las áreas de aplicación en las que notaremos su capacidad transformadora, o al menos tiene ese potencial. A mi juicio, la IA en atención sanitaria es la aplicación más apasionante de esta tecnología.

Sarah de Lagarde: A finales de 2022, sufrí un desafortunado accidente. Mientras viajaba en el metro de Londres, me resbalé en un andén mojado y desnivelado y caí en el hueco que existe entre el vagón parado y el andén; nadie me escuchó ni me vio. El tren reinició su marcha y perdí el brazo derecho por encima del codo y la pierna derecha por debajo de la rodilla.

Finalmente me encontraron y me rescataron y luego me embarqué en un largo proceso de rehabilitación. Me colocaron prótesis. La prótesis de brazo es un artilugio tecnológico especialmente interesante, ya que se trata de un brazo biónico de última generación que incorpora un codo articulado y una mano multiarticulada. Es un equipo no invasivo. Básicamente consiste en una cavidad hecha a medida que tiene unos 16 electrodos incrustados que se colocan en el muñón. Si pienso en un gesto y muevo la combinación correcta de músculos dentro de la cavidad, los electrodos captan la señal y la transforman en impulsos eléctricos que me llevan a poder mover la mano biónica.

Simon Pollard: COVVI se creó en julio de 2017 con la misión de ofrecer una prótesis de mano líder mundial, poniendo el foco en los usuarios y facultativos. Trabajando juntos, queríamos inducir un cambio positivo real en la vida de las personas con algún defecto en las extremidades superiores y dar al paciente final una opción real.

La prótesis está compuesta por una tecnología inigualable o sin parangón. Nuestras innovadoras funciones de asistencia remota, que básicamente permiten acceder a la mano desde cualquier lugar del mundo de forma remota, facilitar las configuraciones y ayudar a establecer ajustes o resolver problemas creados por una incidencia de software. En definitiva, tenemos una aplicación fácil de usar, que está ahí para ayudar a los amputados a entrar y cambiar cualquier configuración, así como reducir la carga de trabajo mental y físico que se precisa para accionar la mano. Cuenta con 24 agarres y gestos programables, que obviamente facilitan la motricidad fina y ofrecen un control preciso y versátil sobre una amplia gama de movimientos de los dedos.

Aquí estamos hoy, con una mano que creemos que está cambiando la vida de las personas en su día a día. El aprendizaje automático proporciona un control personalizado. Por lo tanto, los algoritmos de IA aprenden de los movimientos, patrones y preferencias del usuario y permiten que la prótesis se adapte y se personalice a su comportamiento.

de Lagarde: La parte de inteligencia artificial que incorpora el brazo biónico es realmente interesante porque facilita enormemente la vida de los usuarios. Cada día que uso el brazo se recogen datos sobre el modo en que lo utilizo, y esos datos se alojan en un servidor central y también dentro de una aplicación que tengo en mi teléfono, lo cual me permite calibrarlo todos los días. Cada día la máquina aprende cómo uso esos patrones de agarre específicos y, esencialmente, hace que sea más rápido y fácil de ejecutar. De este modo, un gesto que me habría exigido mucho esfuerzo mental para activarlo, con el tiempo, pasará de 10 segundos a casi ejecutarlo al instante, y eso es súper útil para el usuario final.

Wooldridge: Como digo, creo que la tecnología va camino de permitir que las personas lleven una vida normal en circunstancias en las que antes simplemente se les habría excluido porque no habrían sido capaces de manejarse.

Tengo colegas que piensan que van a poder reconocer la fase inicial de la demencia solo por la forma en que las personas emplean su smartphone. Así, por ejemplo, uno de los síntomas de la demencia será que las tareas cognitivas simples, como encontrar a alguien en una lista de contactos en el teléfono, resulten confusas y te lleven más tiempo. Por lo tanto, detectar cambios en el comportamiento de las personas a través de la IA es algo que parece factible. Aunque debemos señalar que aún no contamos con esa tecnología, no hay ninguna razón por la que no podría existir.

Acker: Creemos que los avances médicos que están ocurriendo hoy día son solo la punta del iceberg de lo que vendrá en el futuro. La cantidad de información y la potencia de procesamiento se están multiplicando; la cantidad de información que obtenemos, por ejemplo, sobre las causas genéticas subyacentes de las enfermedades, está aumentando a un ritmo tan alto que, a nuestro juicio, van a producir avances significativos en el futuro. De hecho, muchos han llamado al próximo siglo el Siglo de la Biología, y no podríamos estar más de acuerdo con esa apreciación.

de Lagarde: Estoy segura de que esto es solo el comienzo de este increíble progreso de la tecnología médica que estamos viendo con la inteligencia artificial. Parece que esta tecnología se puede usar en una gama mucho más amplia de aplicaciones, no solo para prótesis, sino también para mejorar la movilidad, lo cual será interesante, ya que permitirá a las personas mayores mantenerse activas durante el mayor tiempo posible.

Acker: Las oportunidades para la innovación siguen siendo enormes. Hay muchísimas necesidades médicas no atendidas. Pensemos en el cáncer, las enfermedades cardíacas, la diabetes y los que sufren accidentes y necesitan unas extremidades de reemplazo. Vemos que la medicina y la atención sanitaria están experimentando cambios drásticos con estas aplicaciones de la tecnología, y creemos que eso va a crear enormes oportunidades para los inversores en los próximos años.